Sacramento de Matrimonio

Sacramento del Matrimonio

El Sacramento del Matrimonio es una de las formas más profundas de expresión del amor humano, entendida por la Iglesia como una alianza y no como un simple contrato. Según el derecho canónico, la alianza matrimonial establece que el varón y la mujer constituyen entre sí un «consorcio de toda la vida». Esta visión del matrimonio evoca las alianzas de Dios con su pueblo en el Antiguo Testamento, resaltando la naturaleza sagrada y duradera de esta unión.

La Esencia del Matrimonio

El matrimonio es un compromiso ordenado por la naturaleza misma, orientado al bien de los cónyuges y a la generación y educación de la prole. La pregunta que a menudo se plantea es si el matrimonio, tal como lo entiende la Iglesia, debe ser la única forma aceptada de convivencia en pareja. La respuesta a esta inquietud se centra en la intimidad y profundidad de la vida matrimonial, que exige una estructura de fidelidad para proteger a las personas involucradas.

La Promesa de Amor

La famosa fórmula «hasta que la muerte los separe» refleja el carácter definitivo del amor humano y la responsabilidad que implica. Aunque algunas parejas pueden enfrentar dificultades y rupturas, el ideal del matrimonio es que dure toda la vida. La ruptura de una relación matrimonial es un proceso doloroso y traumático, lo que subraya la necesidad de una entrega total y sin reservas en el amor.

Matrimonio Cristiano vs. No Cristiano

El matrimonio cristiano es un misterio que se conecta directamente con el sacrificio de Jesucristo. Si bien el acto de casarse puede ser similar en ambos contextos, la diferencia radica en las personas que se unen. Los cristianos entran en una relación con Cristo, y su «sí» en el altar es un eco de la promesa divina que Dios hizo a su Iglesia. Este compromiso se asemeja a la alianza que Dios estableció con Abraham, donde la fidelidad y el cumplimiento de la promesa son fundamentales.

El Noviazgo como Preparación

El noviazgo se presenta como un camino hacia el matrimonio, un período de crecimiento y madurez. Es un tiempo para desnudar el alma y prepararse para la entrega total que exige el matrimonio. Un noviazgo bien vivido puede llevar a un matrimonio igualmente maduro y sólido. La vida matrimonial, cuando se vive con fe y respeto, se convierte en un reflejo del amor divino en la sociedad, creando una familia cristiana llena de alegría y vida.

Conclusión

El Sacramento del Matrimonio, como un llamado a vivir el amor en su máxima expresión, invita a los cónyuges a entregarse el uno al otro y a sus hijos. La enseñanza de la Iglesia resuena en los Mandamientos de la Ley de Dios, recordando la importancia de vivir en fidelidad y amor.

Este sacramento no solo es un compromiso humano, sino una alianza divina que trasciende el tiempo y el espacio.

Referencia Bíblica

Mc 10, 5-12 Lo que Dios ha unido…

Lc 16,18 El que se casa con la repudiada

1 Cor 7 Precepto es no mio , si no del Señor….

Ef 5, 32 Misterio grande es éste…..

Signo sensible

Compromiso de entrega y fidelidad mutua